Actualizado el 17 de noviembre de 2023

Igual que el tronco del árbol soporta el peso de los frutos y de las ramas que los sostienen, el cuerpo no es inmune a los pensamientos.

Cuando iniciamos el Practitioner en PNL (primer nivel de Programación Neurolingüística) invitamos a los alumnos a hacer una sencilla experiencia. Les pedimos que cierren los ojos y que simplemente se dejen acompañar y guiar por el sonido de mi voz que les invita a focalizar la atención en la visualización de un jugoso limón. Les hago una detallada descripción del limón y les invito a experimentar mentalmente que llevan un trocito a su boca notando su sabor ácido y refrescante… Después de esto y mientras todavía están con los ojos cerrados, les pido que levanten la mano si han notado algún cambio en su salivación. Entonces les guío a abrir los ojos todos a la vez y se dan cuenta de que todo el grupo está con los brazos levantados.

La siguiente pregunta es ¿Dónde está el limón? Y sonriendo suelen señalarse la cabeza.

Mente y cuerpo están interconectados. Como alguien dijo una vez “se equivocó Descartes”. Lo que hay en tu mente influye en tu cuerpo y lo que haces con tu cuerpo influye en tu mente.
La idea de que mente y cuerpo están separados y no se influyen mutuamente, conocida como “dualismo cartesiano”, ha sido objeto de críticas por parte de muchos filósofos, psicólogos y médicos.
De hecho, numerosos estudios científicos han demostrado que la mente y el cuerpo están estrechamente interconectados y que los procesos mentales, como el pensamiento y las emociones, pueden tener un impacto significativo en la salud física. Por ejemplo, el estrés prolongado puede afectar el sistema inmunológico, aumentando el riesgo de enfermedades.

Si sólo es necesario focalizar la atención en un jugoso limón para empezar a salivar ¿qué otras consecuencias pueden tener para el cuerpo los “limones mentales” (es decir, los pensamientos)?

Cuidar la calidad de los pensamientos

Cuidar la calidad de los pensamientos es fundamental para el bienestar.

Además, los pensamientos también pueden influir en nuestras decisiones y comportamientos. Si pensamos que somos incapaces de hacer algo, es menos probable que lo intentemos. Por otro lado, si pensamos que somos capaces y tenemos confianza en nosotros mismos, es más probable que tomemos medidas y alcancemos nuestras metas.

Practitioner en PNL

La experiencia del limón imaginario es una forma divertida e ilustrativa de demostrar cómo la mente y el cuerpo están interconectados y cómo los pensamientos pueden tener un impacto en la respuesta fisiológica del cuerpo. En la formación de Practitioner PNL, se enseña cómo utilizar herramientas y técnicas para generar pensamientos positivos y efectivos que pueden mejorar la salud, el bienestar y el rendimiento en diferentes áreas de la vida.

La PNL es una herramienta poderosa para mejorar la comunicación, desarrollar habilidades de liderazgo y gestionar el cambio. En la formación de Practitioner PNL, los participantes aprenden a modelar y comprender el comportamiento humano y a desarrollar habilidades efectivas de comunicación y liderazgo. También aprenden a utilizar técnicas de cambio y transformación personal para mejorar su propia vida y ayudar a otros a alcanzar sus metas y objetivos.

Esta divertida experiencia del limón imaginario concluye con el anuncio de que, en esta formación (Practitioner PNL), vamos a aprender a generar buenos limones mentales. ¿Y tú? ¿Cómo cuidas de la calidad de tus pensamientos? ¿Eres consciente de la influencia de la mente en el cuerpo? Ojalá que te ocupes de tus “limones mentales”